Entrevista a Inma Torres: «El minimalismo es mucho más que tener pocos objetos»

Entrevista a Inma Torres: «El minimalismo es mucho más que tener pocos objetos»

Inma Torres es una minimalista licenciada en matemáticas, madre y divulgadora del minimalismo como estilo de vida, para quienes quieran crear una vida más plena con menos. Trabaja en liberar al mundo y a muchas personas de un estilo de vida basado en el consumismo, en el “corre que te corre” y en el todo alrededor del “producir”, y cambiarlo a un estilo de vida más sencillo, necesitando menos, pero mucho más pleno y coherente con sus valores. 

Desde 2013 ha escrito más de 600 artículos, ha impartido decenas de charlas, conferencias, talleres y cursos en las ciudades principales de España y también de manera online, bajo la marca mininmamente.com.

Inma considera que la vida es este momento, y estar atentos a lo que pasa a nuestro alrededor, focalizar en lo que es realmente importante y disfrutar de las pequeñas y grandes cosas de la vida,  nos ayudará a encontrar ese equilibrio y bienestar que tanto buscamos.

Así pues, sin más introducciones, comenzamos con la entrevista. Estoy convencida de que como mínimo cambiará vuestra mirada de lo que es el minimalismo, ya que según nos cuenta Inma, es mucho más que vivir con pocos objetos.

ENTREVISTA A INMA TORRES

Te defines como minimalista. ¿Cómo comenzaste a dedicarte a divulgar el minimalismo? Cuéntanos cómo ha sido esta aventura.

El minimalismo llegó a mi vida después de un periodo de mucho estrés, de sentir que, si la vida es esto, que pare el tren que yo me bajo. 

Empecé a leer a blogueros americanos minimalistas, y a aplicar este estilo de vida a mi manera. Escribir lo que hacía en un blog me ayudaba a ordenar mis ideas y a comprometerme con mi cambio. 

El blog empezó a ir muy bien y mis textos e ideas empezaron a ayudar a mucha gente.  Desde pequeña he tenido la inquietud de aportar mi ayuda al mundo, aunque muchas veces no he sabido desde dónde hacerlo. El minimalismo me dio la oportunidad de hacerlo. 

Después empecé a impartir conferencias y talleres  para que otras personas pudieran sentir las sensaciones que yo sentí al empezar siendo minimalista. Es muy gratificante ver que compartir pequeños extractos de mi vida puede enriquecer tanto a la gente.

Muchísimo. 

He estado muchas veces a punto de dejarlo, y siempre he continuado por los mensajes que recibo de las personas que me leen o asisten a mis formaciones, de cómo estas enseñanzas les han cambiado la vida. A mí también me cambió la vida leer a ciertos blogueros o escritores, o asistir a ciertos cursos en su momento, así que creo sinceramente que realmente puedo aportar mi granito de arena al bienestar de las personas que así lo deseen. 

¿A qué tipo de personas ayudas y en qué contextos?

Suelen ser personas muy variopintas, pero con algo en común: están hartas. Hartas de la vida de estrés, de consumo, de excesos… Sienten un “clic” en un momento dado de sus vidas, y quieren un cambio. 

Son personas comprometidas:

  • Consigo mismas, su salud, su formación, su bienestar, su estilo de vida.
  • Con su entorno, su familia, sus hijos, su localidad.
  • Con el medio ambiente, con su cuidado. 

Personas que no están dispuestas a ser “parte de”: consumismo, la prisa, el miedo, la comida basura, la destrucción del planeta, del piloto automático… 

Y que por el contrario, quieren aportar, desde su área de influencia, en hacer este mundo un poquito mejor; empezando por hacer su vida más simple, pero más plena. 

¿Qué significa el minimalismo?

Llevar una vida minimalista puede ser muy diferente para cada cual, pero básicamente tiene esta única regla básica de dos pasos:

1) Enfocarse en lo importante

2) Desechar lo demás

Y en este orden.

Los hábitos minimalistas abarcan distintos aspectos:

  • Hogar, cosas, pertenencias, armario
  • Agenda, actividades, eventos, tareas, compromisos
  • Malestar interior, complejos, cargas emocionales
  • Preocupaciones, autocrítica, miedos: minimalismo mental
  • Minimalismo financiero: simplificar nuestras finanzas
  • Tecnología, minimalismo digital
  • Relaciones, comunicación, vampiros de energía

¿Este concepto tiene que ver solamente con la cantidad de objetos que tenemos o compramos?

No, para nada. De hecho creo que no sería suficiente. Pero es un buen punto de partida, puesto que el orden exterior influye en nuestro orden interior. 

¿En qué áreas de la vida podemos trabajar este tipo de mirada?

En prácticamente todas, o en muy pocas. Cada persona decide dónde necesita más sencillez y calma. 

Por ejemplo, quizás sientes que no consumes en exceso, pero sin embargo llenas tu agenda de actividades, no sabes decir que no a compromisos, o llenas tu mente de preocupaciones o pensamientos que no suman. 

Tampoco hay que hacerse minimalista para simplificar todas las áreas de tu vida. Esto es totalmente libre, y cada cual simplifica donde quiere y hasta donde quiere.

¿Cuál suele ser la más sencilla y la más difícil, y porqué?

También depende de tu personalidad y de las áreas que suelen bloquearte más. Normalmente el minimalismo de pertenencias suele ser el más sencillo: coger un cajón y quedarte sólo con lo verdaderamente esencial. Y continuar con el resto de tu casa. 

Quizás las áreas más difíciles suelen ser aquellas que implican emociones: el desapego emocional, el exceso de compromisos por no decir que no y sentirte culpable, la adicción a las compras o los viajes para aliviar vacíos interiores.

No suele aliviar. Lo hacemos para anestesiar el profundo vacío que sentimos por dentro.

Y lo peor es que lo asociamos sólo a las cosas, a la comida… pero hay personas que llenan ese vacío con actividades, con proyectos, con relaciones, con seguidores en redes, con conocimiento…. 

Cuando seguimos buscando «más», rara vez estamos satisfechos. En nuestra sociedad, somos adictos a más, pero es insaciable. Más nunca es suficiente. Es la forma en que más funciona.

Podemos preguntarnos: qué estoy buscando? ¿Qué vacío quiero llenar?

¿Qué necesito realmente?¿Cuánto más necesitas? Por lo general, es solo un poco más. 

¿Se puede ser minimalista en el uso de herramientas que necesitamos utilizar a diario como las digitales?

Sí, principalmente ahí. Las herramientas digitales nos pueden simplificar mucho la vida, pero la realidad es que, la mayoría de las veces, nos la complican. 

Se trata de tomar conciencia del uso que haces de ellas, reducir tus dispositivos tecnológicos, hacer un uso inteligente del smartphone y, sobre todo, detectar nuestros ladrones de tiempo: redes sociales, correo electrónico, plataformas…

Y también saber desconectar para conectar. Esto no es fácil, puesto que tenemos miedo a “no estar”, a perdernos algo…

El minimalismo pone mucha luz a nuestros miedos, también. 

¿Podemos transmitir a los niños valores como los que promueves, a pesar de que el entorno tire en otra dirección? ¿Qué experiencia tienes en ese sentido?

Cuando escuchamos lo de “llevar un estilo de vida minimalista”, igual nos viene a la cabeza la imagen de la persona adulta, porque muchas veces los adultos deberíamos aprender de los niños en cuanto a la gestión de sus prioridades se refiere, puesto que, la mayoría de las veces, ellos no tienen problemas en saber cuáles son prioridades y enfocarse en éstas, desplazando de su vida lo demás. 

Igualmente los niños pueden ser víctimas, al igual que los adultos, de los mensajes de consumo excesivo.

Muchas de las madres y padres piensan que ser minimalista con niños es prácticamente imposible. Pero esto no es así. No sólo ser minimalista es posible cuando tienes hijos, sino que el minimalismo está lleno de beneficios para ellos, como por ejemplo:

  • Que no se necesita comprar cosas para ser feliz
  • Que se puede llevar una vida diferente a los demás
  • Les ayuda a saber qué es lo importante en su vida
  • Les ayuda a valorar su tiempo y aprenden a gestionarlo
  • Les ayuda a centrarse en las personas más que en las cosas

Los niños traen a tu vida complejidad, ruido y desorden, pero también traen una cantidad infinita de alegría sin necesidad de bienes materiales. Para mí mis hijos son, muchas veces, mis maestros minimalistas. 

Creo que todas las madres y todos los padres influimos en valores en nuestros hijos, ya sea de forma voluntaria o involuntaria. En mi caso, considero que, en parte, he transmitido valores minimalistas a mis hijos, pero también les he dado la oportunidad de que ellos cuestionen también estos valores. 

No soy omnipresente, mis hijos tienen otras influencias distintas a las mías, y esto les enriquece como personas. 

¿En casa del herrero, cuchara de palo, o te consideras un ejemplo de lo que promueves? ¿Cómo ha cambiado tu vida con tu trabajo como asesora?

Trato de ser todo lo coherente que puedo con lo que promulgo, pero evidentemente no soy perfecta (tampoco tengo que serlo) y tropiezo una y otra vez con la misma piedra. 

Muchas veces me desvío del camino minimalista. Entonces siento que he fallado. 

Es un sentimiento profundo en mi corazón, de pesadez en el pecho, de tristeza, de culpa, de vergüenza. Uno que trato de ignorar, de miedo, de desánimo. Me colapsa, me bloquea. 

La sensación de fracaso duele mucho. 

Mucha gente tiene una idea sobre mí. Que soy disciplinada, inteligente, constante, que puedo con todo…

Tengo éxito en la vida, pero no en la forma en que los demás imaginan. Definitivamente no soy un ejemplo a seguir.  Fracaso todo el tiempo y eso es una gran carga para mí. 

Después pienso en todas las personas a las que he ayudado, desde mi “minimalismo imperfecto”, y eso me alivia y me calma. 

Divulgar el minimalismo como estilo de vida me ayuda a mantenerme en el camino una gran parte del tiempo. Y sólo por eso, ya ha merecido la pena pagar los precios de esos momentos en los que soy incoherente, en los que no soy lo que los demás esperan de mí. 

¿Nos recomiendas algún libro en particular sobre el minimalismo y la simplificación?

  • El poder de lo simple, de Leo Babauta.
  • Minimalistamente, de Adriana Coínes.
  • La vida minimal, de Pedro Campos. 

Mil gracias Inma por tu tiempo y por la pasión y sinceridad con la que nos has traido tus reflexiones y experiencias.

Para aquellos que queráis saber más acerca de su trabajo tenéis dos oportunidades:

Este mes de septiembre va a participar en el Atelier Ser Creatividad con una aportación sobre la gestión de nuestro tiempo. Estoy segura de que su participación va a ayudarnos a dejar mucho más espacio para ser creativos en nuestro día a día. Si deseas añadirte al Atelier puedes hacerlo desde solo 15 euros al mes:

Atelier”Ser Creatividad” – EBECA

Tambíen podéis encontrarla en su web https://mininmamente.com/ o en su cuenta de Instagram: @mininmamente, principalmente. Además, Inma Torres fue la organizadora de la primera Cumbre Virtual minimalista “Vida Sencilla y Sostenible”.



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