Ceras recicladas y una visita al American Museum of Natural History de Nueva York

Ceras recicladas y una visita al American Museum of Natural History de Nueva York

Hoy os invito a un juego visual: ¿a que pensáis que corresponden estas imágenes? ¿Un cuadro, un papel pintado, un plato, una foto de un mineral, de qué puede tratarse? Antes de que descubráis el misterio, dejadme que os cuente la historia de su procedencia. Porque a veces el cómo se ha realizado algo es más importante que el resultado final. Hay cosas bellísimas cuyo  proceso de realización está teñido de prácticas sin sentido, por eso en el EBECA la intención es la de compartir experiencias e ideas que contengan una cierta cantidad de belleza por su contenido estético pero también y sobretodo por sus valores.

Desde que vivo en Nueva York aprovecho todas las oportunidades para inspirarme y aprender. Uno de los Museos que no me canso nunca de visitar es el American Museum of Natural History. Me gusta dejarme llevar por los estímulos visuales de los materiales didácticos que se muestran, al margen de su significado. De este modo paso horas observado las texturas de los minerales, las imágenes de las constelaciones y las del interior de la tierra.

Tal vez inspirada por todas las imágenes y texturas que la naturaleza nos regala, he realizado una sencilla manualidad impacto cero cuyo resultado me ha sorprendido y quisiera compartir con vosotros.

Primero os cuento de dónde he obtenido los materiales para realizarla. Desde que formo parte del proyecto Food Coop me encargo de trabajar en la sala del Childcare Room o sala infantil en la que los socios pueden dejar a sus niños mientras realizan su turno de trabajo o hacen la compra. Los niños son acompañados por diferentes adultos que les cuidan de ellos, juegan o les leen cuentos mientras comparten su tiempo en la sala. Los niños pueden utilizar si les apetece para dibujar papel reciclado procedente de los formularios antiguos de la propia Food Coop y sencillas ceras de colores.

Un día, mientras organizaba el espacio, me di cuenta de que las ceras usadas o rotas que eran demasiado pequeñas eran potencialmente peligrosas para los niños entre cero y tres años si caían en el suelo sin darnos cuenta, pues a veces gateaban por el espacio detrás de los niños más mayores y se las podían poner en la boca y correr el riesgo de atragantarse. Pedí permiso para retirar esos pequeños pedacitos por seguridad, y los guardé en casa durante varias semanas, pensando qué podía hacer con ellos. Hasta que un día llevé a cabo este sencillo experimento:

Receta de ceras recicladas caseras

¡Esperad un segundo, aún quedan más historias! Tengo que contaros aún cómo conseguí el otro material necesario para realizarlas. Paseando por la calle encontré un contenedor de silicona con huecos redondos viejo, pero aún utilizable. Es muy normal encontrar en las calles de Brooklyn todo tipo de cosas en estado aún utilizable que las personas dejan en la calle y no en el contenedor de la basura, sabiendo que otras lo utilizarán, especialmente en barrios como Park Slope. Era un tipo de molde así.

Pues bien, los agujeritos del molde me parecía que tenían poca profundidad  para realizar magdalenas, así que estuve pensando qué utilidad darle. Una amiga me había contado la idea de derretir ceras, así que decidí hacer una prueba. Puse en el molde algunos trocitos de de ceras de colores en cada uno de sus agujeritos, y los dejé deshacer dentro del horno por pocos minutos a 180 grados. Cuando comprobé que quedaban líquidas, extraje el  molde del horno con muchísimo cuidado, y las dejé enfriar. ¡Y éste es el resultado!

Unas ceras multicolor que recuerdan a mil y una de las texturas que tuve la oportunidad de contemplar en el Museo de Ciencias Naturales, pero que también pueden tener otras mil lecturas. ¿Cuál es la vuestra?

Son ideales para hacer regalos de cumpleaños, y son funcionales. ¿Quién dijo que un regalo casero impacto cero no es igual de bonito que uno comprado?

Dejad vuestras opiniones si os ha gustado esta experiencia o si tenéis alguna otra idea de regalos sostenibles impacto cero. Y compartid, como siempre, si pensáis que puede ser de utilidad a otras personas. ¡Muchas gracias!

Enlaces de interés:
American Museum of Natural History 

A partir de ahora tienes a disposición el espacio virtual «Atelier Ser Creatividad». Un espacio para cuidar tu creatividad como adulto todo el año, con recursos de crecimiento personal y desarrollo artístico de lo más variado.

Si tienes dudas sobre este espacio virtual, escríbeme a: maria@mariafolch.com



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